Sí, las coronas dentales requieren ciertos cuidados especiales para garantizar su durabilidad y mantener la salud bucal en general. Aunque están hechas de materiales resistentes como porcelana, zirconio o metal-porcelana, no son indestructibles y necesitan mantenimiento similar al de los dientes naturales.
Es fundamental mantener una buena higiene oral, cepillando los dientes al menos dos veces al día, usando hilo dental (especialmente alrededor de la corona) y realizando limpiezas dentales regulares. Esto ayuda a prevenir problemas como caries en el diente que sostiene la corona o inflamación de encías en esa zona.
Además, se recomienda evitar hábitos como morder objetos duros, abrir envases con los dientes o rechinar los dientes (bruxismo), ya que podrían dañar o fracturar la corona. Si hay tendencia al bruxismo, el dentista puede indicar el uso de una férula nocturna. Con los cuidados adecuados, una corona dental puede durar entre 10 y 15 años o más, conservando su función y estética.
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Cirujano Dentista - Dr. José Cano Salinas