Cepillarse los dientes es fundamental para mantener una buena salud bucal y general. La principal razón es que elimina la placa bacteriana, una capa pegajosa que se forma constantemente sobre los dientes y encías. Si no se elimina con el cepillado, esta placa puede endurecerse y convertirse en sarro, lo que provoca caries, mal aliento y enfermedades de las encías como la gingivitis o la periodontitis.
Además, el cepillado ayuda a prevenir enfermedades más allá de la boca. Diversos estudios han demostrado que una mala salud bucal puede estar relacionada con problemas cardíacos, diabetes, complicaciones en el embarazo y otras condiciones de salud sistémica, ya que las bacterias orales pueden ingresar al torrente sanguíneo.
Cepillarse al menos dos veces al día con una buena técnica, acompañado de hilo dental y enjuague bucal, mantiene los dientes limpios, las encías sanas y el aliento fresco. También refuerza la protección del esmalte gracias al uso de pastas dentales con flúor. Es un hábito sencillo pero esencial para el bienestar a largo plazo.
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Cirujano Dentista - Dr. José Cano Salinas