Sí, el tipo de cerdas del cepillo sí afecta la salud bucal, y elegir el adecuado es clave para una limpieza eficaz y segura. Las cerdas se clasifican principalmente en suaves, medianas y duras, y cada tipo tiene un impacto diferente sobre los dientes y encías.
Las cerdas suaves son las más recomendadas por odontólogos, ya que limpian eficazmente sin dañar el esmalte dental ni irritar las encías. Son ideales para la mayoría de las personas, especialmente aquellas con encías sensibles, problemas de sangrado o tratamientos dentales recientes. Las cerdas medianas pueden ser útiles en casos específicos, pero si se usan con demasiada presión pueden causar desgaste dental o retracción de encías. Las cerdas duras, por su parte, no suelen recomendarse, ya que aumentan el riesgo de abrasión en el esmalte y daño en los tejidos blandos.
Usar un cepillo con cerdas inadecuadas o desgastadas puede empeorar la salud bucal en lugar de mejorarla. Por eso, además de elegir el tipo correcto de cerdas, es importante cepillarse con una técnica adecuada y cambiar el cepillo cada tres meses.
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Cirujano Dentista - Dr. José Cano Salinas