Sí, puedes comer después de una endodoncia, pero es importante tomar algunas precauciones para evitar molestias o daños al diente tratado.
Primero, debes esperar a que pase el efecto de la anestesia, que suele durar entre 1 y 3 horas. Comer mientras aún tienes adormecida la boca puede hacer que te muerdas la lengua, la mejilla o los labios sin darte cuenta.
Cuando ya haya pasado la anestesia, se recomienda comer alimentos blandos y templados durante las primeras 24 a 48 horas. Evita masticar por el lado del diente tratado y no consumas alimentos duros, pegajosos o muy calientes, ya que podrían provocar sensibilidad o incluso fracturar el diente si aún no está restaurado con una corona.
En resumen, sí puedes comer, pero hazlo con cuidado. Sigue las indicaciones de tu dentista y, si aún no te han colocado la corona final, recuerda que el diente está más vulnerable y debe protegerse.
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Cirujano Dentista - Dr. Jose Cano Salinas
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